Las ramas de Hyde Park que hoy oscurecen la mesa donde escribo, ¿no son en su quietud las contempladas algún lejano día que regresa? Se dibuja un perfil, la vaga imagen de un paisaje que agota su presencia como demora de su ser inmóvil. El caer de las hojas reconoce su tránsito fugaz en la distancia que separa la vida de su muerte.
viernes, 9 de octubre de 2009
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Pexiooxoo *-*
ResponderEliminaresta muyy xuLOO! :)
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